sábado, 7 de febrero de 2009

¿por qué un instante puede parecer eterno?
¿por qué una mirada nos puede desgarrar para siempre?
¿a partir de qué medida determinamos que ese instante, esa mirada, son infinitos?
¿qué tan profundos tienen que ser esos ojos?
¿qué esconden detrás?
¿por qué quedan grabados, no sólo en la memoria, sino en el alma, que los sufre?
ella es quién se desgarra, quién los contempla e intenta desifrar el misterio, esa inmensidad que se haya detrás
cada mirada es un mundo, un mundo infinito
en lo efímero de cada día... ¿dónde te encuentro?